Poblaciones indígenes


POR Carol Waleed Fathi Abdelmonem
REVISADO POR Patricia Revilla

Su cultura y su tradición son de las más antiguas del mundo y, sin embargo, han sido y son continuamente desalojados de su patria. Aunque sean muchos (casi un 8,3% de la población), son invisibles para los sistemas políticos y gobiernos latinoamericanos. Pero tienen una voz, la cual habla de esperanza y de reivindicación. Ellos son los indígenas de América Latina.

Desde hace muchas décadas, los pueblos indígenas han sido desplazados continuamente por los colonizadores, los cuales siempre han querido apropiarse de sus tierras ancestrales para extraer de ellas diferentes recursos naturales. Y es en este continuo proceso de explotación de la tierra (que conlleva una degradación del medio ambiente) y en la búsqueda de reconocimiento, donde reside la lucha de estas poblaciones indígenas.

Además, en la sociedad civil, los nativos también están sujetos a la discriminación porque mucha gente permanece todavía ligada a una idea antigua y estereotipada del indio como alguien atrasado y lejos del mundo moderno. Esto da lugar al racismo y a la consiguiente segregación de los indígenas dentro de los sectores educativos, médicos y en la vida pública.

Asimismo, a causa de los continuos desplazamientos y de la discriminación y los conflictos que sufren en sus tierras, la Corte Constitucional Colombiana ha declarado que actualmente hay un promedio de 35 grupos indígenas en peligro de extinción. De hecho, algunas empresas dedicadas a la ganadería y a la explotación de la madera, el oro y el petróleo continúan, hoy en día, amenazando a estos pueblos. Así que, no nos extrañemos si oímos decir, por ejemplo, a un indígena de la comunidad de Kawashivas, en Brasil, que las empresas de oro le han quitado su casa. O que los pueblos nativos de Guatemala no pueden beber el agua del Rio, la misma agua que, tiempo atrás, solían beber sus padres, porque las multinacionales de petróleo la han contaminado con sus sustancias tóxicas. O que los indígenas de Nicaragua han sido encarcelados, como si fueran criminales, por intentar proteger sus derechos.

Está claro entonces que, quienes tienen gran parte de responsabilidad en la extinción de los pueblos indígenas son las grandes multinacionales y todo el proceso de globalización. Sin embargo, es importante recordar que los pueblos nativos no están en contra del desarrollo, sino que ven el crecimiento desde la perspectiva de la tierra y del campo. De hecho, muchos de ellos viven de la industria tradicional vendiendo productos agrícolas y materias primas, lo cual no es suficiente para sobrevivir a la llegada de productos más baratos y competitivos, como los que provienen de Estados Unidos y Europa.

Por esta razón, los nativos de hoy buscan alianzas con ONG y, en particular, con los movimientos medioambientales, para poder protegerse de las empresas extranjeras, tener una representación dentro de la vida política y poder así luchar por sus derechos, llevando la batalla a una audiencia internacional. Durante años, estas luchas obtuvieron resultados positivos, como la institución del llamado ‘Convenio 169’, el cual protege los derechos de los indígenas, o como el reconocimiento del derecho a ser consultados previamente ante cualquier programa de explotación. De hecho, en la Declaración de los Derechos Humanos, se contempla el deber de indemnización ante cualquier daño provocado a estas comunidades nativas.

Démonos cuenta de que, realmente, los pueblos indígenas representan los primeros pasos hacia un futuro mejor y, por ello, debemos ser conscientes y asegurar que estas leyes sean respetadas. El derecho a tener una educación y a ser reconocidos son derechos universales que valen para todos, y los indígenas representan, de alguna manera, la historia que todos nosotros compartimos. Por ello protejámosles, pues al hacerlo, también estamos salvando parte de nuestra identidad.

“Sólo cuando el último árbol esté muerto, el último río envenenado, y el último pez atrapado, te darás cuenta de que no puedes comer dinero.” (Proverbio indoamericano).