Los voladores de Papantla

POR Irina Eliszabetha Rusu  REVISADO POR Raúl Palomares Domínguez

A todos nos dejaría boquiabiertos el hecho de ver como cuatro hombres descienden desde lo alto de un poste al ritmo de la música totonaca (música tradicional de México). Pero para descender hay que saber cómo hacerlo, no sólo por seguridad, sino también para poder mantener la esencia de siglos y siglos de tradición.

Papantla del Olarte es un pueblo mágico de México. Ahí se encuentra el Tajín, una antigua capital indígena del pueblo Totonaco, que ahora forma parte del Patrimonio de la Humanidad por UNESCO. También Papantla es la casa de una población que ha decidido conservar la recesa cultural de las tribus totonacas, sus vestimentas, danzas y su folklore. Los Totonacos provienen de India, donde ya vivían antes de la conquista española.

Una de las actividades de la que el pueblo está más orgulloso es la Ceremonia de Los Voladores de Papantla, también llamados Los Hombres-Pájaro. Este espectáculo es muy famoso por el misterio, los vestidos, la música y el color que lo rodea. Pocos realizan la danza de los Voladores, pues no se utilizan muchas palabras y las canciones están en totonaco mezclado con el español. La ceremonia se encuadra en un marco incomparable de leyendas, tradiciones y supersticiones desde hace mucho tiempo.

Los Orígenes

En el pasado Papantla fue víctima de una gran sequía que tuvo un tremendo impacto en los pueblos de la región. Para poner freno a esta situación y en busca de una situación, resultó esencial pedir ayuda a los dioses. Llamaron a los protectores divinos para que lloviera así como para garantizar la fertilidad de la tierra. Los viejos sabios de ese tiempo consideraron que para la demanda era necesario utilizar como poste el árbol más alto, recio y recto del monte. Consideraban que las demandas debían de ejecutarse en las alturas porque sólo así los dioses podrían escuchar sus súplicas y peticiones. El esfuerzo tuvo un resultado positivo, así que el pueblo totonaco sintió que la necesidad de realizar este tributo periódicamente para que la tierra siguiera dando rendimiento.  

La Danza

Cinco hombres ejecutan el espectáculo, todos vestidos de rojo y blanco, con accesorios colorados que representan el sol y sus rayos de luz intensos. Los hombres se suben a un poste muy alto y se atan desde la parte superior con una cuerda. El caporal, uno de los hombres-pájaro, se sienta en lo base del palo y canta, toca la flauta o golpea un tambor. Los otros cuatro, los voladores, representan los puntos cardinales de la tierra, así como los cuatro elementos. Se lanzan hacia la parte trasera del palo y comienzan un descenso elegante y sobrecogedor para la audiencia. En su descenso, cada uno completa 13 vueltas, siendo un total 52 entre todos los voladores, número que refleja los años en el siglo del calendario Azteca.

Otros hechos interesantes sobre la Ceremonia de los Voladores:

Antes

1. La ceremonia no comenzaba con la danza, pero sí con el momento en el que el caporal se iba al monte para buscar un buen árbol.

2. Estaba prohibido pasar por encima del tronco y también que una mujer lo tocara porque eso podría representar la mala fortuna para los voladores.

Hoy

3. Existen algunas mujeres voladoras, pero su número sigue siendo inferior al de los hombres.

4. El palo volador es metálico y la estructura es más moderna y segura.

5. La danza no se realiza solamente en Papantla del Olarte, sino también en otros pueblos de México.

6. Cada año los voladores participan en el Encuentro de Voladores en el Tajín.

7. La ceremonia está reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad de México.